Sin embargo, no he podido resistir la tentación y al pasar, como todos los días, POR EL PASEO DEL VENDAVAL, del que toma nombre mi cuaderno, me he acercado para ver in situ la canallada, algo más que una gamberrada, y con la cámara de mi móvil he sacado estas fotografías. Sirvan sólo como prueba de la suciedad y del deterioro que este espacio está sufriendo. Tal vez no guste a algunos; algún comentario enlazado en este cuaderno va en ese sentido, pero eso no justifica en absoluto el deterioro, la suciedad, el descuido, que al poco tiempo de su inauguración está ya soportando.
Me parece que no lo he dicho todavía. Quizás sera ahora el mo
mento. Este verano hice una visita a mi tierra, a mi ciudad, a Cuenca, ciudad histórica y declarada Patrimonio de la Humanidad.
Habitualmente me recorro todo el casco histórico de la ciudad y en esta ocasión me sorprendió y muy gratamente el cuidado, la limpieza, la conservación y restauración que está teniendo permanente. ¡Y no encontré ni una sola pintada en todo el casco histórico!
estos grafiteros puñeteros hay que ponerlos a pintar el mobiliario urbano en el verano en beneficio de la comunidad
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