¡Gaza arde!

 

Así lo ha anunciado esta misma mañana el ministro de Defensa israelí en redes sociales, tras una noche intensa de bombardeos en la Franja.   La realidad es que hace casi dos años que Gaza no deja de arder, Gregorio. Y los titulares siguen llenando las noticias. Los bombardeos no cesan mientras el hambre y la muerte están omnipresentes, e Israel ordenó hace unos días evacuar la ciudad de Gaza. Ante esto, la ciudadanía y algunas instituciones siguen pidiendo el fin de este horror, como las protestas con motivo de la Vuelta Ciclista o el reciente informe de la Comisión de Investigación de la ONU que concluye que Israel está cometiendo un genocidio.   Porque Israel está cometiendo un genocidio. Un genocidio que ya ha terminado con casi 65.000 vidas (casi 19.000 niños y niñas). De ellas, 349 han muerto de hambre. Hay 164.000 personas heridas. Miles de familias destrozadas que han dejado todo atrás para salvar la vida. Niños y niñas que se han quedado completamente solos tras perder a toda su familia. Madres y padres que ven a sus hijos morir de hambre. Llevamos meses denunciándolo, Gregorio. Seguiremos haciéndolo, hasta que el genocidio pare. Hasta que los responsables rindan cuentas ante la justicia. Porque lo que ocurre en Gaza es inhumano y no puede quedar impune. Gracias por no mirar hacia otro, por alzar la voz y por defender siempre los derechos humanos.   El mundo necesita más personas como tú.   Carlos de las Heras Responsable de la campaña sobre derechos humanos en Israel y Gaza en Amnistía Internacional España